martes, 31 de enero de 2012

Una adicción mortal



Mirando entre la oscuridad
hallo tu rostro lleno de luz
que envuelve a las más bajas pasiones
de mi alma moribunda...

Devora de un solo bocado
la piel de la lujuria
que ansia tenerte en sus brazos
entre sabanas tibias...

Si ser tu amante me toca ser
no importa que el infierno sea mi castigo
si con tus besos delirantes
envías mi alma al cielo...

Te convertirás en el cómplice
de lo que soy capaz,
provócame con una caricia tuya
que como pétalo de una bella flor
desencadena mi locura inmensa...

Gemidos de engaños,
besos de incertidumbre,
toque de tus dedos
en la intima flor mía...

Delirio de placer,
una bocanada de aire en ti,
locura desbordante,
una cuchilla penetrante...

Hiéreme suavemente,
desesperadamente.
que mi cuerpo arde por tenerte,
que mi alma ardiente
te desea locamente...


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