miércoles, 23 de mayo de 2012

Vivir en soledad...

No es que no te ame,
no es que te odie...
simplemente es un grito en silencio
que trae consigo tu nombre.

Ya no queda tiempo de amar,
ya no puedo dar más...
ya siento el abismo, me observo sonreír,
ya la incertidumbre se ha de marchar.

Tu alma no me deja respirar,
he dejado de ver mi reflejo,
el reflejo de un alma herida
ante la cruel realidad de su vida.

Quiero morir, tú me estrangularás
con la soga de tu ingenuo desprecio,
maldito ángel infiel...
perforas mis sentidos.

Me haces dormitar eternamente,
clavando en mi cripta
las espinas de la verdad,
maldita dignidad que desaparecio.

Querré matarte,
en un beso entregar el mismo veneno
de la noche en que me enamore de ti
mas no puedo hacerlo,
ya no tengo ganas de...

Vivir en esta soledad,
algo que tu alma no entiende,
no sabes lo que quiero,
el veredicto ya esta escrito.

El fin de esta oscuridad
se irá con el amanecer de sus alas,
cansada de luchar caeré a ellas
como mis lagrimas al corazón.

Y entonces seré feliz...
sólo cuando ya no tenga que...

Vivir en esta soledad.


viernes, 11 de mayo de 2012

Tanto de ti...

 
 
Tiene tus ojos, tus labios, tu piel, tu sonrisa, tu forma de amar, de besar...
tiene tanto de ti y aun así no logro despojarme de él sabiendo que no eres tú...
tiene lo que siempre soñe, tu cabello negro, tu mirada de amante...
tiene siempre las palabras precisas y tiene mis sueños en sus manos...
tiene tanto de ti y aun así te extraño...
 
 

lunes, 7 de mayo de 2012

A una gran mujer...



¿QUIEN NO HA PERDIDO A ALGUIEN ESPECIAL?

Esa persona a la cual, estamos unidos con un delgado hilo, la persona con quien siempre o en ciertas ocaciones discutimos, alguien que inconcientemente amamos mas nunca somos abiertos a expresarlos.
Si, hablo de nuestra madre (apuesto a que nadie habìa pensado en ella) y en esta ocasiòn quiero dedicarle este escrito a una madre que para mi es simbolo de adminracion, un gran ejemplo de vida. Por un gran desempeño en la vocaciòn màs difìcil...ser mujer.
Creo que la mujer de quien hablo se merece un gran homenaje para honrrar su memoria, esta madre (esplendida) lucho con todas sus fuerzas para educar, alimentar, criar a sus tres hijos ademàs de haber enfrentado una dura batalla contra la deabetes y ser una psicologa exelente de profeciòn.
Las memorias de su hijo menor Yami y su afàn de no perder los recuerdos, muy gratos para èl (y para mi), son las que me inspiraron a escribir esta nota.
Ella, que con ferocidad y valentia dìa a dìa enfrento la enfermedad que angustiaba a su familia, algo que para muchos pareciera no ser tan grave pero quien la vive sabe lo difícil que es llevar su vida de manera "normal". ¡Qué fortaleza!, sin contar lo que significa el tener un bebe, el ser madre (me refiero a la lavor de parto).
Además de luchar con su enfermedad, esta admirable mujer con tenacidad afrontó las problemas que se generaban en su familia, asuntos personales que por respeto a sus hijos, no he de revelar.
Los atemorizantes momentos de su enfermedad, como aquella ocasión en que esta mujer valiente, golpeo sus delicadas piernas contra las patas del comedor que hizo sangrar sus venas abultadas. Y es ahí donde Yami aún en su temor y cierto grado de panico, mantuvo la calma (vaya que es sorprendente), él sin dejar de presionar la herida llamó a su padre, quien se dirigio de inmediato y con rapidez hacia su hogar para después dirigirse al hospital.
¿Qué sentirías, si tu madre se desploma sin razón alguna en la entrada de tu hogar, callendo a los pies de tu padre?
Tiempo después, no sé muy bien cuanto, esta gran madre y mujer llego grave al doctor, ahí donde los medicos luchan por salvar vidas. En ese blanco edificio ella, tan fuerte comenzo a debilitarse, era el momento de partir...
Con gran tristeza y pesar esa mujer admirable de la que habló, partió. Su familia con dolor tuvo que afrontar su muerte y ahora, nuestro buen amigo Yami se culpabiliza de no haber entregado lo suficiente, de pasar los viernes con sus amigos (lo que nosotros llamamos viernes sociales), de no expresar todo lo que sentía por ella, de no agradecer cada cosa que hacía por su bienestar.
Una enorme nostalgía lo embuelve al no poder contarle a su madre sus experiencias de vida, sin poder compartir sus triunfos y caídas, su nervio y su tranquilidad mas...siempre pensando en ella con amor y respeto.
Yami recuerda los gratos momentos de su corta visita al mercado de valle de aragon, donde él decía con gran alegría-¡¿Mamá, mamá, me das tres pesos para comprarme unas papas?!- y ahí iba su pequeñin, felizmente a comprar su botana. Que maravillosa imagen la de un hijo y una madre haciendo su mandado.
Así que...¿Por qué no voltear a mirar con amor y admiración a una mujer que cruza la calle, a una prostituta pues su trabajo no es nada fácil y no por ello es menos mujer, o simplemente a nuestra propia imagen maternal?
¿Por qué no ser capaces de abrazarla y decir "Te amo"?
"La vida es un instante, pequeño, fugaz...
las palabras se las lleva el viento...
pero los recuerdos, esos, permanecen en la memoria y en el corazón."
No tengas miedo de decirle a esa gran mujer cuanto es que la amas, la admiras, la respetas porque el día de mañana tal vez no este ahí.
Y si ya ha partido, ten por seguro de que mientras permanesca el recuerdo, ella vivirá al igual que siempre, no importa que, tú madre siempre estará apoyandote y orgullosa de ver en lo que te has convertido (raras veces dejan de hacerlo).
Antes de despedirme un breve consejo para aquellos que piensan no serán buenos padres:
"No puedes ser buen padre,
si no eres un buen hijo."
Y para mi querido Yami creo que jamás me cansaré de repetirlo...ella, esta orgullosa de ti y contigo.
Me despido con esto:
Una mujer sin importar su color de piel, su religion, pais, etc; libra las batallas más increibles que apuesto, ningun hombre podría afrontar con gran valor y responsabilidad...chicas, ser mujer es una razón para luchar (si, lo saque de un libro, pero que va).


viernes, 4 de mayo de 2012

Memorias que reviven hoy



Cómo duelen las memorias ocultas de un pasado que no volverá jamás, cómo pierdo la cordura cuando a mi lado estas, cómo duele verte en sus ojos que nunca me han de amar, cómo puedo pensarte, sentirte, tocarte en otro cuerpo, cómo es que te olvide pero sigues en mi, cómo es que llegue a este punto, sin ti y contigo, cómo ha logrado infiltrarse en mi cripta repleta de telarañas que ahora parece un campo reverdecido en primavera. Te amo y te amo en él, en sus besos, caricias, en su fuego y en su mar, en la calma y en la tempestad, en en presente y en el pasado, en momentos día con día y en mis memorias noche a noche.